ENTREVISTA MARINA BADÍA

"Los personajes se relacionan sin comunicarse"

La protagonista de ‘Covet is not the word anymore’, Eva Magaña, entrevista a su directora y guionista MARINA BADÍA.

¿Cuanto más raro, mejor? Si con raro asociamos la forma más fiel de mostrar sentimientos y sensaciones, entonces sí.

¿Qué echas de menos en el cine independiente? Que apenas hay y su difícil acceso. Las salas están cada vez más inundadas por superproducciones sin dejar hueco a este tipo de cine.

Si Lynch hubiera nacido en Mallén… ¿Qué películas habría hecho, qué localizaciones habría utilizado, qué actores españoles, aragoneses, habrían formado parte de su reparto. En definitiva, ¿qué historias habría contado? Si hubiera nacido en Mallén hubiera vuelto a escribir y dirigir Twin Peaks pero seguramente con un nombre más a lo español y una Laura Palmer morena.

Además de en Mallén y en Zaragoza has vivido, mientras estudiabas, en Lisboa, Granada y Aranjuez. ¿Te ves en Los Ángeles, donde sí hay una industria audiovisual? Me veo en aquel lugar donde pueda llevar a cabo mis inquietudes audiovisuales, está claro que en Estados Unidos, y concretamente en Los Ángeles la industria es mucho más activa que en otras partes del mundo, así que ¿por qué no?

¿Qué hay del universo de Lynch en ‘Covet is not the word anymore’? Escenarios, ambientación y protagonistas. Colores, objetos y motivos. Personaje protagonista y de fondo otros que influyen en la trama, todos los personajes tienen conexión entre sí y se relacionan aún sin comunicarse formando parte de un mismo cosmos.

Aunque haya que tener todo bien atado antes de comenzar a rodar, siempre surgen cosas. ¿En qué medida entra lo no planeado en tus rodajes? En gran medida. Los imprevistos siempre tienen algo bueno que aportar, mejorar y hacer más grande la idea, lo no planeado es muchas veces la clave que te hace incluso dar un giro a la historia inicial convirtiendo el resultado final en algo que supera tus expectativas.

Como dijo Clarice Starling a Hannibal Lecter en ‘El Silencio de los corderos’: “Codiciamos lo que vemos cada día”. ¿Qué codicias tú, Marina? Porque no creo que tengas acallar el grito de ningún cordero… Codicio más oportunidades para gente cualificada y joven en este país que puede aportar mucho a su ámbito de estudio y tristemente se ve obligada a abandonar su origen.